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La ley antiempleo de California ya está aplastando a los trabajadores independientes

En 1971, Isaac Asimov escribió una extraordinaria novela, Los propios dioses, sobre una máquina que genera energía ilimitada de forma gratuita, desafiando el principio económico fundamental conocido como escasez. Más tarde se sabe que la bomba de electrones se origina en un agujero en el espacio que conecta los universos paralelos. El día del juicio final está cerca, ya que se ha descubierto que pronto se destruirán las galaxias y que el sol hará metástasis en una supernova. El quid de la cuestión es comparable a lo que sucede en California.

Los legisladores del Estado poseen una fuente infinita de buenas intenciones, utilizando el suministro eterno para pavimentar los caminos al infierno. Con el poder de esta benevolencia y munificencia ilimitada, los políticos están regulando la vida de los ciudadanos mientras evisceran su existencia en el proceso. Si esto es buena voluntad, entonces sólo podemos imaginar de lo que es capaz el Estado cuando desea arruinarte a ti o a tu negocio.

La fiesta está en marcha

En septiembre, el gobernador demócrata de California, Gavin Newsom, firmó la ley AB-5, que requiere que la mayoría de las compañías reclasifiquen a los trabajadores independientes y a los trabajadores eventuales como empleados de tiempo completo. Hacer esto significa que tales individuos serían elegibles para un salario mínimo estatal garantizado de 12 a 13 dólares, beneficios y protecciones bajo el inmenso código de leyes de empleo de California. Entró en vigor el 1 de enero.

«Como una de las economías más fuertes del mundo, California está estableciendo ahora el estándar global de protección de los trabajadores para que otros estados y países lo sigan», dijo la asambleísta Lorena González (D), la autora del proyecto de ley, en una declaración.

El AB-5 fue elogiado por el trabajo organizado, pero resulta que los trabajadores no están entusiasmados con él.

La ley impacta a cerca de dos tercios de los dos millones de contratistas independientes del estado; exime a muchos profesionales de cuello blanco, incluyendo arquitectos, abogados, doctores y agentes de bienes raíces. Pero los especialistas en el cuidado de niños, enfermeras, escritores y conserjes no pueden permitirse el mismo lujo. Los camioneros recibieron una exención de último minuto después de semanas de batallas polémicas, pero se dice que huyeron del estado antes de que el país gritara «Auld Lang Syne». En cuanto a los camioneros que se quedaron atrás, la Asociación de Camioneros de California afirma que está recibiendo llamadas de individuos que están saliendo del estado.

Los escritores independientes pueden ser los próximos en decir adiós a California. En adelante, los autónomos están limitados a treinta y cinco presentaciones anuales por cliente. Como cualquier escritor atestiguará, puede ser fácil alcanzar esta cuota cuando se presenta el contenido a las empresas de medios de comunicación, dejándole en una búsqueda interminable de más empresas que acepten su prosa sobre la crisis existencial en la era de la deconstrucción.

Disminución de clientes y proyectos

Apenas unas semanas después de que la AB-5 se convirtiera en ley, Vox Media anunció que cientos de escritores independientes, principalmente contribuyentes de deportes para su sitio web SBNation.com, recibirían la carta de despido. La ironía detrás de esta decisión corporativa es que Vox respaldó el proyecto de ley y celebró su aprobación. Ahora Vox los está reemplazando con veinte nuevos miembros de personal a tiempo completo y parcial.

Cuando González se enfrentó a esto en Twitter, ella lo tuiteó:

Estos nunca fueron buenos trabajos. Nadie ha sugerido eso, ni siquiera los autónomos. Seguiremos trabajando en esto el próximo año.

Además, desestimó las quejas, instando a todos a «educarse» sobre los beneficios del AB-5.

Un usuario de Twitter resumió el pensamiento de los muchos afectados por esta ley: «Vaya, realmente apestas en esto».

La CNBC habló con Jeremiah LaBrash, quien gana la mitad de sus ingresos anuales trabajando por cuenta propia. Con base en Los Ángeles, el dibujante independiente notó la disminución de clientes y proyectos potenciales. Cuando LaBrash presentó propuestas a las empresas de medios de comunicación, estos empleadores lo rechazaron cuando se enteraron de que era de California. Le dijo a la cadena de noticias de negocios:

He hecho que me contraten y luego vuelvan y digan que ya no están interesados. De repente, alguien con quien nunca he hablado dice: «Hemos decidido no seguir adelante». Nunca me había pasado eso antes de este año.

Mis ahorros están estancados. No puedo pensar en comprar una casa. El mercado de la vivienda aquí ya es difícil.

Una vez más, los planificadores centrales paternalistas se esfuerzan por tomar las decisiones por los adultos. No entendieron que muchos freelancers disfrutan de ser profesionales independientes, estableciendo sus propios horarios y optando por la libertad en lugar de una estructura de nueve a cinco. El proyecto de ley se comercializa como una red de seguridad, pero la pregunta es: ¿de qué sirve una red de seguridad si no tienes trabajo?

¡Vete de California o quiebra!

Cuando informó por primera vez sobre el proyecto de ley, Kelli Ballard de Liberty Nation escribió que el lema histórico había sido «¡California o el fracaso!». Después de años de gran invasión del gobierno, Ballard plantea que ahora es «¡Vete de California o quiebra!». Puede que no sea tan simple. La mayor preocupación es que otros estados azules adoptarán eventualmente una legislación similar para combatir la economía de trabajos independientes de un billón de dólares nacional, demostrando que no hay forma de escapar de la mala economía.

Originalmente publicado en Liberty Nation.

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Image Source: Wikipedia
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