Power & Market

Los EEUU veta acción internacional sobre Gaza

En el mundo del patrocinio, no hay nada peor. Los Estados Unidos está al servicio de Israel, es un cobeligerante: al sostener activamente a las fuerzas armadas de Israel y al interferir diplomáticamente en favor de sus políticos, América actúa como «patrocinador principal» de Israel, cómplice de crímenes de guerra, señalando al Estado judío que le permitirá continuar con su malvado juego final.

Como aventuré en enero, la emisión del equivalente de un cese y desistimiento legal o una orden de alejamiento contra un delincuente violento, Israel, es urgente y debería haberse producido hace mucho tiempo. Ya es demasiado tarde para Gaza como masa terrestre habitable.

Mientras los progresistas alababan a la Corte Internacional de Justicia (CIJ), mi perspectiva sobre la indecisión de la Corte, hace unos meses era más sombría. (A pesar de que no me centraba en las definiciones legalistas de genocidio, para mí era obvio que había que detener de inmediato lo que indudablemente era un asesinato en masa y una limpieza étnica, —crímenes que están en curso—. Un delincuente violento, un asesino en serie, debe ser detenido; ¡no amonestado y observado!

Si la Corte Internacional de Justicia fuera una organización eficaz y justa, habría emitido algún tipo de orden vinculante de cese y desistimiento, algún tipo de orden de restricción, por así decirlo, ordenando a las Fuerzas de Defensa de Israel que pusieran fin a sus depredaciones.

Otro tribunal internacional, la Corte Penal Internacional (CPI), había «emitido», en marzo de 2023, órdenes de detención, nada menos que «contra dos individuos en el contexto de la situación en Ucrania», uno de los cuales era el Sr. Vladimir Vladimirovich Putin, presidente de la Federación Rusa, a quien se buscaba por crímenes de guerra. Con respecto a Israel, la inepta Corte Internacional de Justicia parece comprometida.

En una sociedad justa, las restricciones morales que se aplican al individuo deben extenderse también a la colectividad. Los actos inmorales prohibidos individualmente no pueden ser sancionados colectivamente. Si el ciudadano no debe asesinar, tampoco debe hacerlo el Estado, cualquier estado.

EL ALTO EL FUEGO DEL CONSEJO DE SEGURIDAD DE LA ONU ES VINCULANTE

Una resolución del Consejo de Seguridad no desvirtuada por los EEUU podría haber incluido un llamamiento a la imposición de sanciones diplomáticas, militares, políticas y económicas, la congelación de activos israelíes, el despliegue de una fuerza de protección y la creación de un tribunal para futuros enjuiciamientos.

En su incontestable superioridad, los Estados Unidos ha afirmado, además, que la resolución de alto el fuego de la ONU «no es vinculante». «Completamente falso», echa humo el experto en la ley internacional Graig Mokhiber, en una entrevista, el 26 de marzo, con Amy Goodman, de «¡Democracia ya!». Y parafraseo al Sr. Mokhiber:

La Carta de las Naciones Unidas establece que todos los miembros de las Naciones Unidas están obligados a aceptar y cumplir las decisiones del Consejo de Seguridad. La Carta, en su artículo 25, y las decisiones posteriores del Corte Internacional de Justicia, han hecho indiscutible que las resoluciones del Consejo de Seguridad son vinculantes para todos los Estados miembros.

La última resolución de alto el fuego no sólo es vinculante, sino que, dado que Israel la incumple, abre la oportunidad de presentar una resolución para su aplicación en virtud del capítulo VII de la carta Naciones Unidas que «faculta al Consejo de Seguridad para orquestar... acciones colectivas... a través de un Comité de Estado Mayor».

Una resolución del Consejo de Seguridad no alterada por los Estados Unidos podría incluir un llamamiento a la acción corpórea: sanciones diplomáticas, militares, políticas y económicas, congelación de activos israelíes, despliegue de una fuerza de protección y creación de un tribunal para futuros enjuiciamientos.

Si se deja en manos de los europeos y americanos sin timón —no han hecho nada para detener lo que Ron Unz ha calificado como el primer asesinato masivo televisado de la historia— es a un tribunal celestial a quien estaremos esperando.

Las cicatrices se tejerán, pero los muertos no resucitan, y los miembros jóvenes no volverán a crecer. Más de diez niños pierden sus piernas diariamente a manos de las IDF. Pensemos en la suerte de estos niños que han quedado cojos de por vida, ya que los EEUU y los líderes mundiales no lo han hecho.

Una vez más, estos truhanes y cursis judiciales y políticos (con perdón de la comunidad canina) podrían haber cortado el suministro de municiones a los culpables. (Algunos lo han hecho. Dios bendiga a Canadá por poner un embargo a la exportación de kayaks y jarabe de arce a Israel). Sin los americanos (usted y yo, los contribuyentes); Israel no duraría ni un día en su valiente batalla contra las madres y sus bebés. Repito: Podríamos frenar la ofensiva de Israel imponiendo sanciones y boicots, congelando los activos israelíes en todo el mundo, como se hizo con los rusos. Se podrían haber emitido órdenes de arresto, como la Corte Penal Internacional había para los rusos.

En esencia, dejar de asesinar y mutilar palestinos, sin condiciones.

ANIQUILACIÓN, NO GUERRA

La guerra de Israel no es una guerra según ninguna definición conocida.

Un alto el fuego se pide en la guerra. Esto no es una guerra.

El alto el fuego se define como «un acuerdo, generalmente entre dos ejércitos, para dejar de luchar con el fin de permitir discusiones sobre la paz». La embestida de Israel contra Gaza no es una guerra bajo ninguna definición. No se trata de dos ejércitos enfrentados. No es una guerra entre fuerzas guerreras opuestas. No hay paridad.

¿Por qué Gaza 2023/2024 no es una guerra?

Si el veterano de combate Alan Shebaro, de las Fuerzas Especiales de EEUU, no consigue convencerle con su experiencia, yo le seguiré con hechos, leyes y razones. Escuche a Shebaro contárselo al Ayuntamiento de McKinney, en Texas:

«Conozco la guerra. Lo que está ocurriendo en Palestina ahora mismo no es una guerra. Es la deshumanización, es el genocidio, es la limpieza étnica de un pueblo específico para tomar su tierra. Esto está mal... He visto cosas horribles, pero esto [Gaza] lo lleva a un nivel completamente nuevo».

¿Acaso algún militar medianamente decente se traga la mentira de que, en su aniquilación orgiástica de Gaza, Israel está luchando limpiamente contra otro ejército? También es un término equivocado la frase «operación militar». Se burla del significado de cualquier convención lingüística que asigna palabras a las cosas que significan.

El valor se perdió, no fue robado, cuando, el 24 de octubre de 2023, el coronel Jack Jacobs, un veterano retirado del ejército de EEUU —y un hombre que valientemente habló en contra de la invasión de Irak (ídem), habló de la «expansión de las operaciones terrestres» de Israel.— El coronel Jacobs, que una vez fue una voz de principios, perdió la respetabilidad, porque no hay operación militar que un militar honrado pueda apoyar en Gaza, donde fácilmente el 80% de las víctimas son civiles inocentes.

En relación a este último hecho es el secretario de Defensa de EEUU, Lloyd Austin. En una declaración rápidamente retractada, el secretario de Defensa Lloyd Austin dijo al Congreso, el 19 de febrero  «que más de 25.000 mujeres y niños habían sido asesinados por Israel en Gaza desde el 7 de octubre».

El Pentágono «aclaró» posteriormente esa estimación, insistiendo en que, dado que la cifra procedía del Ministerio de Sanidad de Gaza, dirigido por Hamás, y no de los servicios de inteligencia de EEUU, no era fiable. Durante febrero, en el Congreso audiencia se le preguntó a Austin cuántas mujeres y niños palestinos había matado Israel. «Son más de 25.000», había dicho por reflejo: Esto, según el Pentágono, no fue más que un lapsus monetario.

El tontería de EEUU contradice lo que yo denominé, el 4 de enero, la norma de «tus ojos mentirosos», por utilizar la irónica frase de Richard Pryor para quien ha sido sorprendido en flagrante delito:

«Mientras convertían Gaza en Dresde en la televisión, ante nuestros propios ojos, los propagandistas estatales de Israel nos decían a nosotros, sus financiadores americanos, que «esto no está ocurriendo». ... ¿A quién vas a creer? ¿Al Israel democrático o a tus ojos mentiros? Yo creo en «ojos mentirosos», muchas gracias. Esos ‘ojos mentirosos’ hablan de la magnitud de las depredaciones de Israel contra los gazatíes. ... [Y las cifras de muertos, heridos y desplazados] son consideradas ‘ampliamente fiables’ por todas las organizaciones humanitarias y de ayuda de renombre en todo el mundo, respaldadas como están por la ciencia del satélite y el radar».

Permítasenos la estimación ya desfasada del secretario Austin, para establecer aquí que la «operación» de Israel no es una operación militar detrás de la cual pueda estar cualquier militar que se precie:

Supongamos que 25.000 es el número de mujeres y niños asesinados por los israelíes, aunque es más, no menos, teniendo en cuenta que miles están enterrados bajo los escombros y más almas están siendo asesinadas mientras hablamos: A saber, en las 24 horas siguientes a la votación de los Consejos de Seguridad, 76 palestinos fueron asesinados en Gaza

SI 30.000 es el total —hombres y mujeres, combatientes y civiles— asesinados hasta ahora, entonces las mujeres y los niños representan el 83,3% de este total. (25,000/30,000) *100

SI 32.000 es el número total de almas asesinadas hasta la fecha; entonces el porcentaje de mujeres y niños es del 78,1. (25,000/32,000) *100

SI un total de 33.000 seres humanos fueron sacrificados; entonces el porcentaje de mujeres y niños entre ellos es de 75,5. (25,000/33,000) *100

Y si el número de asesinados asciende a 35.000, como ha sucedido, y el número de mujeres y niños asesinados se mantiene, por algún milagro, constante, su porcentaje seguiría siendo (25.000/35.000) *100= 71,4.

La guerra de Israel no es una guerra bajo ninguna definición.

A pesar de los untuosos ultimátum de la ONU, el 21 de marzo Netanyahu había prometido continuar su campaña de payaso malvado, —tan «bien equipado  para fracasar» como observe en noviembre— ejecutada por un ejército corrupto, payasamente inepto y sistemáticamente depravado.

image/svg+xml
Note: The views expressed on Mises.org are not necessarily those of the Mises Institute.
What is the Mises Institute?

The Mises Institute is a non-profit organization that exists to promote teaching and research in the Austrian School of economics, individual freedom, honest history, and international peace, in the tradition of Ludwig von Mises and Murray N. Rothbard. 

Non-political, non-partisan, and non-PC, we advocate a radical shift in the intellectual climate, away from statism and toward a private property order. We believe that our foundational ideas are of permanent value, and oppose all efforts at compromise, sellout, and amalgamation of these ideas with fashionable political, cultural, and social doctrines inimical to their spirit.

Become a Member
Mises Institute