Power & Market

Bidenomía: mitos propuestos y hechos desconcertantes

El presidente Biden y sus partidarios afirman que cogió una economía que estaba «de capa caída» en 2021 y la convirtió en «la envidia del mundo». ¿Cómo lo consiguió Biden? Supuestamente reconstruyó la economía «desde el centro hacia fuera y desde abajo hacia arriba».

Los datos sobre la situación de la economía estadounidense en los últimos años son claros. En primer lugar, las tasas de desempleo han sido relativamente bajas. Sin embargo, la tasa de desempleo durante la crisis de Covid alcanzó un máximo del 14,8% en abril de 2020, y había caído al 6,1% en el momento en que Biden firmó su Plan de Rescate de América (ARP) en marzo de 2021. Los economistas dudan de la eficacia de las políticas de estímulo fiscal, incluso cuando se aplican en el momento oportuno. El ARP proporcionó demasiado estímulo fiscal demasiado tarde, en el mejor de los casos. En el peor de los casos, el ARP supuso un peligroso incremento de la deuda nacional de los EEUU, un aumento del riesgo a largo plazo de insolvencia nacional.

En segundo lugar, los salarios reales han aumentado en el último año. Pero los salarios cayeron bruscamente durante la recesión de 2022, y más que la productividad laboral. La productividad laboral aumentó desde 2022, pero esta recuperación de la productividad laboral no produjo un aumento correspondiente de la remuneración real, como se ve en el siguiente gráfico.

¿Por qué han divergido la productividad laboral y la remuneración de los trabajadores? El reciente aumento de la productividad laboral sugiere que los empresarios pueden permitirse aumentar la retribución real de los trabajadores: la capacidad de los empresarios para permitirse una retribución procede de la productividad laboral. El hecho de que las tasas de desempleo hayan sido tan bajas recientemente sugiere que los trabajadores tienen suficiente poder de negociación para ajustar su remuneración a su productividad.

En tercer lugar, la semana laboral media suele aumentar durante una expansión económica.

La media de horas por trabajador cayó durante la crisis de Covid, subió en la segunda mitad de 2020, pero alcanzó su máximo en enero de 2021. ¿Por qué la economía de Biden se ha quedado corta tanto en términos de remuneración real como de semana laboral media? ¿Los problemas de la cadena de suministro limitaron la demanda de más horas de trabajo? No es probable. Los problemas de la cadena de suministro disminuyeron a medida que se reducía la semana laboral media.

Las debilidades de la economía Biden pueden deberse al aumento de la regulación federal. Las cargas que supone el cumplimiento de la normativa y las pérdidas de eficiencia debidas a la regulación aumentan los costes, reducen los beneficios esperados y limitan la producción. Biden aumentó significativamente la regulación federal, y los empresarios seguramente han tratado de trasladar el aumento de los costes de la regulación a sus empleados. Es decir, los empresarios redujeron las horas de trabajo y utilizaron esta reducción de la demanda de mano de obra para reprimir los aumentos salariales, con el fin de compensar al menos en parte el aumento de los costes normativos.

Mucha gente está descontenta con la economía de Biden, y con razón. Los trabajadores seguramente perciben aumentos en su propia productividad, así como una falta de aumentos correspondientes en la remuneración real. Los trabajadores seguramente también saben que no están ganando un salario adicional por las horas extra que deberían esperar durante cualquier expansión económica. Además, una semana laboral más larga se traduciría en más producción, más bienes y quizás menos inflación. La verdad es que Biden heredó una recuperación vigorosa, que parece haber ahogado de arriba abajo con aumentos innecesarios de la regulación federal.

Originalmente públicado en «On the Other Hand...»

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