La propiedad privada de los medios de producción es la institución fundamental de la economía de mercado. Es la institución cuya presencia caracteriza a la economía de mercado como tal. Donde no existe, no se trata de una economía de mercado.
La propiedad significa el control total de los servicios que pueden derivarse de un bien. Esta noción catalizadora de la propiedad y los derechos de propiedad no debe confundirse con la definición jurídica de la propiedad y los derechos de propiedad que figura en las leyes de diversos países. La idea de los legisladores y los tribunales fue definir el concepto jurídico de propiedad de tal manera que el propietario estuviera plenamente protegido por el aparato gubernamental de coacción y compulsión, y que nadie pudiera invadir sus derechos. En la medida en que este propósito se realizó adecuadamente, el concepto legal de los derechos de propiedad correspondió al concepto catalizador.
Sin embargo, hoy en día hay tendencias a abolir la institución de la propiedad privada mediante un cambio en las leyes que determinan el alcance de las acciones que el propietario está autorizado a realizar con respecto a las cosas que son de su propiedad. Si bien se mantiene el término propiedad privada, estas reformas tienen como objetivo la sustitución de la propiedad pública por la privada. Esta tendencia es la marca característica de los planes de las diversas escuelas del socialismo cristiano y del socialismo nacionalista. Pero pocos de los defensores de estas escuelas han sido tan entusiastas como el filósofo nazi Othmar Spann, quien declaró explícitamente que la realización de sus planes provocaría un estado de cosas en el que la institución de la propiedad privada se preservaría sólo en un «sentido formal, mientras que en realidad sólo habría propiedad pública».
Es necesario mencionar estas cosas para evitar las falacias y la confusión popular. En el caso de la propiedad privada, la catalizadora se ocupa del control, no de los términos, conceptos y definiciones legales. La propiedad privada significa que los propietarios determinan el empleo de los factores de producción, mientras que la propiedad pública significa que el gobierno controla su empleo.
La propiedad privada es un mecanismo humano. No es sagrado. Nació en las primeras épocas de la historia, cuando las personas con su propio poder y por su propia autoridad se apropiaron de lo que antes no había sido propiedad de nadie. Una y otra vez, los propietarios fueron despojados de sus propiedades mediante la expropiación. La historia de la propiedad privada se remonta a un punto en el que se originó a partir de actos que ciertamente no eran legales. Prácticamente todos los propietarios son sucesores legales, directos o indirectos, de personas que adquirieron la propiedad ya sea por apropiación arbitraria de cosas sin dueño o por expoliación violenta de su predecesor.
Sin embargo, el hecho de que el formalismo legal pueda remontarse a cada título, ya sea a la apropiación arbitraria o a la expropiación violenta, no tiene ningún significado para las condiciones de una sociedad de mercado. La propiedad en la economía de mercado ya no está vinculada al origen remoto de la propiedad privada. Aquellos acontecimientos de un pasado lejano, ocultos en la oscuridad de la historia de la humanidad primitiva, ya no son de interés para nuestros días. Pues en una sociedad de mercado sin intervención, los consumidores deciden diariamente de nuevo quién debe ser el propietario y cuánto debe poseer. Los consumidores asignan el control de los medios de producción a quienes mejor saben utilizarlos para satisfacer los deseos más urgentes de los consumidores. Sólo en un sentido legal y formalista los propietarios pueden ser considerados como sucesores de los apropiadores y expropiadores. De hecho, son mandatarios de los consumidores, obligados por el funcionamiento del mercado a servir mejor a los consumidores. El capitalismo es la consumación de la autodeterminación de los consumidores.
El significado de la propiedad privada en la sociedad de mercado es radicalmente diferente de lo que es bajo un sistema de autarquía de cada hogar. Cuando cada hogar es económicamente autosuficiente, los medios de producción de propiedad privada sirven exclusivamente al propietario. Sólo él cosecha todos los beneficios derivados de su empleo.
En la sociedad de mercado, los propietarios de capital y tierra pueden disfrutar de su propiedad sólo empleándola para la satisfacción de los deseos de otras personas. Deben estar al servicio de los consumidores para tener alguna ventaja de lo que es suyo. El hecho mismo de poseer medios de producción les obliga a someterse a los deseos del público.
La propiedad es un activo sólo para aquellos que saben cómo emplearla de la mejor manera posible en beneficio de los consumidores.
[Este artículo es un extracto del capítulo 24 de La acción humana y es leída por Jeff Riggenbach].