Los líos antimonopolio de Google son sólo el ejemplo más reciente de firmas privadas que utilizan el poder gubernamental para ahogar a su competencia. Esta historia es tan antigua como los gobiernos y el comercio, pero aunque los detalles cambien, la narrativa básica sigue siendo la misma. Teniendo esto en cuenta, ¿por qué no ahorrar tiempo de redacción reduciendo la intervención a sus elementos básicos? Propongo un sencillo comentario de forma para debatir este tipo de intervenciones:
Hoy se ha anunciado que [agencia gubernamental] emprenderá acciones legales contra [empresa a] por supuestas infracciones de [una ley redactada por una combinación de burócratas y sus socios corporativos].
Las alegaciones de la [agencia gubernamental] fracasan por varios motivos. En primer lugar, las definiciones de [presunto delito] son vagas y tienden a ser interpretadas arbitrariamente por los reguladores. En segundo lugar, la perspectiva económica predominante en estas cuestiones se basa en [teoría económica desacreditada pero políticamente útil], inspirada en la obra de [economista desacreditado pero políticamente útil]. Por lo tanto, es difícil demostrar que se ha producido una infracción o, si se ha producido, que representa una amenaza grave para el bienestar de los consumidores.
De hecho, los principales competidores de [firma a], [firmas b, c, d...n], han animado a la [agencia gubernamental] a presentar estos cargos. Estos rivales han sido incapaces de competir con la innovadora [práctica de negocios protegida por la regulación] de [firma a], y prefieren recurrir al juego político antes que intentar superar la prueba de mercado.
Sin embargo, el hecho de que [la firma a] sea objeto de un ataque injusto no significa que haya que defenderla ni ética ni económicamente. No es un ejemplo de emprendimiento de mercado y de progreso humano. Más bien al contrario: [la firma a] también ha utilizado tácticas de búsqueda de rentas para suprimir a sus rivales y adquirir privilegios de monopolio. Ha apoyado [aumentos del salario mínimo, leyes de concesión de licencias más estrictas, protección del comercio, litigios sobre propiedad intelectual, etc.], lo que ha contribuido a proteger su cuota de mercado.
Dicho esto, sin embargo, las sanciones recientemente propuestas para [firma a] perjudicarán al mercado, no lo ayudarán. Se añadirán nuevas normas a las anteriores, se concederán privilegios adicionales y se producirá una distribución de la riqueza ligeramente diferente entre [firmas a, b, c, d...n].
La solución es acabar con todas las regulaciones y privilegios, lo que garantizará que los empresarios del mercado sólo puedan obtener beneficios en la medida en que mejoren el bienestar de los consumidores.