Podemos ver que estos programas de estímulo masivo de un billón de dólares generan un impacto positivo a largo plazo prácticamente inexistente, sólo un rebote a corto plazo que dura menos de un trimestre.
Fueron las políticas gubernamentales las que pusieron en marcha el motor de la innovación financiera, a la que muchos en la prensa y en el mundo académico de izquierdas culpan erróneamente de este aumento de la inestabilidad económica.
La historia de las Américas como la «pacificación» violenta y el acorralamiento de los pueblos indígenas libres por parte de los forasteros blancos borra la larga historia del estatismo en muchas zonas del Nuevo Mundo.
Los años de burbujas y mala inversión tienen un lado negativo: la destrucción de las partes productivas y generadoras de riqueza de la economía. Y eso podría significar unos tipos de interés más altos.
Hasta que no haya una nueva clase de política exterior informada por una perspectiva de moderación, no debe esperarse ningún tipo de castigo o degradación de los que han llevado a cabo las guerras chapuceras de las últimas décadas.
La mortalidad ajustada por edad en el Reino Unido aumentó en 2020 hasta el mismo nivel experimentado por última vez en 2008. Sin embargo, el gobierno no declaró ninguna crisis sanitaria nacional en esos años.
El gasto deficitario —que engendra una política monetaria inflacionaria— ha sido una bendición para el sector financiero y sus multimillonarios. Naturalmente, a los directores generales de los bancos les encantaría deshacerse del techo de la deuda.
Las investigaciones revelan que en el África subsahariana los niños de familias polígamas tienen 24,4 veces más probabilidades de morir que los de familias monógamas.
El caos económico al que asistimos no es culpa de la economía de mercado. Más bien los precios en algunas áreas de la economía tienen que subir tanto y tan rápido para armonizar la oferta y la demanda que los empresarios apenas pueden seguir el ritmo.
The Mises Institute is a non-profit organization that exists to promote teaching and research in the Austrian School of economics, individual freedom, honest history, and international peace, in the tradition of Ludwig von Mises and Murray N. Rothbard.
Non-political, non-partisan, and non-PC, we advocate a radical shift in the intellectual climate, away from statism and toward a private property order. We believe that our foundational ideas are of permanent value, and oppose all efforts at compromise, sellout, and amalgamation of these ideas with fashionable political, cultural, and social doctrines inimical to their spirit.