Los economistas libertarios de Beltway aclaman hoy los esfuerzos de la Reserva Federal para curar la crisis económica o incluso sugieren que intervengan en mayor medida para aplacar los temores en los mercados. Eso es como decir que necesitamos propagar el coronavirus a más gente para detener la pandemia.
La Reserva Federal creó la crisis económica con su campaña de más de una década de tipos de interés ultra bajos y una política de relajación cuantitativa que inyectó una liquidez masiva en los mercados financieros. Esta política monetaria sin precedentes hizo que las empresas se apalancaran más y se embarcaran en programas de gasto de capital a escala masiva.
Esto hizo inevitable una crisis económica. El coronavirus es simplemente el fósforo que encendió la mecha. Es sólo un detonante de la crisis. Justo antes del evento, el mercado de valores estaba en sus máximos y el desempleo en sus mínimos. ¡Las cosas eran literalmente demasiado buenas para ser verdad!
Luego la Reserva Federal anunció un recorte de emergencia del tipo de interés el 3 de marzo, y se espera que reduzca su tasa a cero en un futuro próximo. La mayoría de la gente, incluso los economistas, se quedaron sacudiendo la cabeza. ¿Por qué reducir las tasas cuando la economía va tan bien? ¿Cómo pueden los recortes de las tasas hacer algo sobre un problema médico o una interrupción de la cadena de suministro?
La verdad es que la «política monetaria», es decir, la inflación, no puede resolver tales problemas. La verdad es que la Reserva Federal está tratando de manipular los mercados de acciones y bonos. Hasta ahora no ha funcionado e incluso podría decirse que está fallando.
Es la inflación de la oferta monetaria de la Reserva Federal y las tasas de interés ultra bajas lo que causó la inevitable crisis en primer lugar. También ha ayudado a permitir déficits de billones de dólares y una explosión de la deuda nacional. Ha animado a las empresas a emitir más bonos, y una gran parte de los bonos marginales de grado de inversión (BBB) pronto se dirigirán al estatus de bonos basura. También ha alentado a los inversores particulares a no ahorrar ni invertir en activos seguros y a poner su dinero en acciones de mayor riesgo porque no pueden ganar intereses de los bancos ni dividendos de las empresas seguras. Cualquier economista debería considerar que todos estos efectos son malos para la economía.
La Reserva Federal es la causa de la crisis, no la cura.
