Razón versus emoción en economía: una respuesta praxeológica
El campo de la economía conductista resta importancia al papel de la praxeología intencionada en la economía. La economía austriaca no comete ese error.
El campo de la economía conductista resta importancia al papel de la praxeología intencionada en la economía. La economía austriaca no comete ese error.
Aunque la mayoría de los economistas admiten que el valor es subjetivo, siguen errando al concentrarse en la escasez y la elección en lugar de en la acción intencionada de los individuos.
Aunque los partidarios de la banca de reserva fraccionaria afirman que los bancos informan a los depositantes de que en realidad son prestamistas (y los bancos son prestatarios), un estudio de la letra pequeña dice lo contrario.
Mientras que Murray Rothbard creía que la autopropiedad constituía la base de los derechos de propiedad privada, otros filósofos no están de acuerdo.
La economía austriaca se distingue de la corriente económica dominante por su enfoque deductivo del análisis económico.
Aunque la filosofía es una disciplina secuestrada por la izquierda, de vez en cuando aparece un filósofo que nos sorprende.
Aunque Leo Strauss no compartía la aceptación del historicismo por parte de G.W.F. Hegel, le dedica una crítica comprensiva. David Gordon examina más de cerca a ambos hombres.
Aunque Graham Priest parece haber «rescatado» al marxismo de la teoría del valor trabajo, no puede rescatar al propio marxismo.
Muchos conservadores, al intentar alejar a los EUA del «wokeísmo», no comprenden que sus planes de «grandeza nacional» son igual de perjudiciales.
El filósofo Michael Huemer plantea un desafío a la metodología del a priori, pero David Gordon responde al timbre.