Los residentes en Estados Unidos cuyos familiares hayan muerto con o de covid podrán recibir 7.000 dólares para gastos funerarios y relacionados, según anunciaron el senador neoyorquino Chuck Schumer (Demócrata) y la representante Alexandria Ocasio-Cortez (Demócrata).
Durante una reunión informativa en Queens el lunes 8 de febrero, el dúo anunció que 267 millones de dólares de los beneficios funerarios financiados por el gobierno federal se destinarían a familias de bajos ingresos sólo en Nueva York. El paquete, añadió Schumer, forma parte de un programa de fondos para catástrofes de 2.000 millones de dólares gestionado por la Agencia federal de gestión de emergencias (FEMA) que proporcionará beneficios a las familias de todo el país.
En su discurso, Ocasio-Cortez explicó que las familias «están teniendo que pagar por el almacenamiento de los cuerpos de sus propios seres queridos», además de cubrir los gastos de funeral y entierro.
«Esto está mal», añadió.
El anuncio fue muy bien recibido en las redes sociales, por lo que no fue una sorpresa ver a pocas personas cuestionando las intenciones del dúo.
Pero si el objetivo es ayudar a los afectados por la pandemia, ¿por qué ninguno de los dos demócratas planteó planes de ayuda a las familias que perdieron a sus seres queridos en las respuestas de los distintos gobiernos estatales al coronavirus?
Una pandilla inmerecida
Tras los primeros informes de infecciones, la mayoría de los estados tenían órdenes de permanecer en casa desde marzo de 2020. Aunque algunos gobernadores empezaron a levantar algunas de las restricciones en junio, la mayoría las mantuvieron, y volvieron a endurecerlas para el Día de acción de gracias.
A estas alturas, ya sabemos que las paralizaciones forzadas de negocios crearon un patrón de destrucción que será difícil de remediar. Según los datos de Yelp, 97.966, o el 60%, de los 163.735 negocios que figuran en la plataforma y que cerraron entre marzo y agosto no volverán a abrir. Para muchos de estos propietarios de pequeños negocios y sus empleados, los confinamientos inesperados significaron pobreza, depresión y falta de acceso a la sanidad, todos ellos problemas que también provocan muertes.
Según algunas estimaciones, las muertes asociadas a factores distintos del coronavirus constituyen al menos un tercio de todas las muertes excesivas durante la pandemia.
Las muertes por desesperación, que incluyen el suicidio y la drogadicción, han aumentado en todo el país desde el comienzo de los confinamientos, así como las muertes causadas por el retraso o la interrupción del tratamiento médico. La tasa de abusos domésticos también está creciendo, poniendo un mayor número de vidas en peligro. Uno pensaría que los congresistas tratarían de utilizar los datos relacionados con los cier para impulsar otro paquete de beneficios. Sin embargo, todos parecen restar importancia a las muertes y el sufrimiento causados por las órdenes de confinamiento del gobierno.
Antes de presionar para que se reembolsen los gastos funerarios a las familias cuyos seres queridos han fallecido por el covid, Ocasio-Cortez trató de restarle importancia al apoyo de los Demócratas a los confinamiento, culpando a los Republicanos que no llevan caretas de «obligar» a los estados a cerrar.
«Esto es lo que me resulta irónico: todos estos Republicanos, toda esta gente que estaba en contra del confinamiento, eran las mismas personas que no llevaban máscaras, que nos obligaron a confinar en primer lugar», dijo en un vídeo de Instagram Live.
A pesar de sus afirmaciones, dos de los estados más afectados por la pandemia, California y Nueva York, fueron también dos de los primeros en promulgar mandatos de máscara. Pero el lunes 8 de febrero, la congresista neoyorquina no tuvo palabras de compasión para las familias cuyos seres queridos murieron debido a los tiránicos mandatos promulgados por gobernadores como el de Nueva York, Andrew Cuomo, que ahora cree que los confinamientos han ido demasiado lejos.
«Simplemente no podemos permanecer cerrados hasta que la vacuna alcance la masa crítica. El coste es demasiado alto», tuiteó tras la toma de posesión del presidente Joe Biden.
Si Schumer y Ocasio-Cortez realmente están trabajando para ayudar a las familias de bajos ingresos que perdieron a sus seres queridos en 2020, están decepcionando a un gran número de estadounidenses (e inmigrantes).
