Una de las propuestas más reiteradas a través de la obra de Ludwig von Mises es el rol que juegan las ideas en moldear la sociedad. Aquí un fragmento de Teoría e Historia:
Pensamiento e ideas no son fantasmas. Son cosas reales. A pesar de ser intangibles e inmateriales, son factores que forjan cambios en el reino de lo tangible y de las cosas materiales.
La forma en que han sido transmitidas las ideas ha cambiado dramáticamente a través del tiempo: desde los relatos orales de la antigüedad, el surgimiento de la imprenta, el auge de la televisión hasta el mundo digital de hoy. Para cada era hay un nuevo medio de comunicación reinante. Por ejemplo: la imprenta se transformó de un privilegio de las élites nobles, a un medio creado para las masas. El mundo digital de hoy es uno de los que está en constante cambio, y ahí existe un fenómeno que puede ser, particularmente, realmente útil para usar en la batalla de las ideas: los memes.
Mientras que casi todos los usuarios de Internet están familiarizados con la palabra “meme”, aún existen algunos que malentienden lo que es.
El término “meme”, se originó en el trabajo del Biólogo y Activista Ateo Richard Dawkins, sin embargo el término cobró vida por sí mismo en el mundo de Internet. Los memes son imágenes creadas con el propósito de transmitir alguna clase de idea, no importa lo profunda o trivial. El público hacia el cual va dirigido el mensaje puede ser amplio, sin embargo las imágenes usadas requieren una pre-existencia como referencia en la cultura popular, eso asegura una mejor comprensión de la idea.
Como otras formas de comedia, un meme necesita un patrón reconocible de reglas para que pueda dar en el blanco.
Usando esas fórmulas previamente entendidas, los memes pueden transcender las barreras culturales y geográficas. Un breve ejemplo a continuación demuestra que se puede entender un mensaje político, simplemente al reconocer el formato:
Las imágenes virales han estado en Internet desde el comienzo de la red, pero en años recientes se han vuelto muy importante para los movimientos políticos. Notablemente, los memes se volvieron una forma particular de orgullo entre la Alt-Right, la cual se movilizó virtualmente para apoyar la campaña de Donald Trump y otros movimientos nacionalistas alrededor del mundo. La Alt-Right bautizó a esta táctica como “Meme Magic”. A pesar del término, obviamente el fenómeno no tiene nada de supernatural. Lo que realmente se observa es una nueva forma de competencia en la batalla de las ideas.
Mientras que el triunfo de Donald Trump hizo el “Meme magic” famoso, no es el único movimiento político que se beneficia de esta nueva herramienta. Bernie Sanders obtuvo titulares en la prensa nacional gracias a las campañas realizas por sus propios “Memelords” o community managers. Claro, otros políticos han optado por tratar de censurar los memes. Mientras que los memes han servido para expandir las ideas libertarias (como “Impuestos son Robo”), también han servido para impulsar movimientos en América Latina. El mini-documental de Reason sobre el movimiento libertario en Brasil toca el tema del poder de los memes y cómo estos, han logrado esparcir las ideas libertarias en países tradicionalmente de izquierda.
Hay una clave común entre todos los memes políticos que tienen éxito: las ideas que son comunicadas, por lo general no pertenecen al establecimiento. Después de todo, los mejores memes son aquellos que buscan causar alguna reacción, lo cual es difícil de lograr si te mantienes dentro de lo políticamente correcto.
Lo anterior puede calzar con lo que Mises entendía sobre el impacto de las ideas en la sociedad. Como escribió en The Ultimate Foundation of Economic Science:
Las ideas que cambian el clima intelectual de un ambiente dado, son esas que nunca se habían escuchado.
Reencauchar ideas y volverlas nuestras pueden tener un gran impacto, y no necesariamente tienen que ser ideas “originales” como lo describe Mises en su libro. Después de todo, algunos hallazgos radicales de la Escuela Austríaca fueron el redescubrimiento de antiguas percepciones pensadas por grandes filósofos. Así que la efectividad de un meme, no depende de su originalidad, simplemente debe ser preciso en comunicar las ideas que no son expuestos en los medios tradicionales de comunicación.
Concluyendo: es fácil rechazar las tendencias que aparecen en Internet al tratarlas de banales, pero es importante reconocer el impacto que tienen en la cultura. Ya se ha visto cómo las redes sociales juegan un rol determinante en derrocar tiranías. Aunque el uso de propaganda visual no es nada nuevo, Mises entendió que la esperanza por una sociedad más libre, depende de ganar la guerra de las mentes y corazones:
Todo lo que pasa en nuestra sociedad es resultado de las ideas. Buenas o malas. Lo que se necesita es combatir las malas ideas.
Y en el mundo de hoy, eso incluye la batalla de los memes. Por así decirlo.
Traducción por Torres Oviedo.