No dejes que tus adversarios críen a tus hijos
Como las escuelas gubernamentales siguen propagando la ideología colectivista, es hora de que más padres declaren su independencia y eduquen a sus hijos en casa.
Como las escuelas gubernamentales siguen propagando la ideología colectivista, es hora de que más padres declaren su independencia y eduquen a sus hijos en casa.
El fact-checking se ha convertido en una auténtica industria en los medios de comunicación. Sin embargo, las conclusiones de los «verificadores de hechos» parecen alinearse misteriosamente con las opiniones de las élites. Esa es su historia, y las élites políticas, educativas y sociales se aferran a ella.
La educación superior se promociona a sí misma como líder en resultados equitativos, pero la realidad es bien distinta, especialmente en lo que se refiere a las mujeres.
Las recientes protestas en los campus a raíz del conflicto Hamás-Israel se han enmarcado como antiapartheid o antisemitas. El conflicto es mucho más profundo, pues hunde sus raíces en políticas identitarias tóxicas.
Los detractores de las admisiones heredadas en las universidades afirman que esta práctica es racista y admite a estudiantes que no lo merecen. Los resultados a largo plazo de estas admisiones demuestran por qué las universidades siguen empleándolas.
Hace diez años descubrí el Instituto Mises. Este es el consejo que me gustaría poder devolver a mi yo más joven.
La deuda estudiantil es un enorme problema social, pero la razón es que los propios costes de la enseñanza superior se han convertido en un gran problema y son una carga financiera cuyos costes superan a sus beneficios.
Aunque Barbados y Jamaica tenían más similitudes que diferencias cuando se independizaron de Gran Bretaña, Barbados desarrolló su economía mucho más rápidamente.
Los adeptos del dogma izquierdista impulsan cada vez más la idea de que se debe permitir a los profesores distraer, confundir o influir en sus alumnos hablando de sus creencias personales, ideas y actividades y elecciones privadas en el aula.
Contrariamente a la afirmación de que los subsidios de los contribuyentes a la enseñanza superior aportan grandes beneficios sociales, estos subsidios son en realidad una transferencia de riqueza de los menos favorecidos a los ricos.