Historia de EEUU

En 1929, lo que quedaba de la política laissez-faire en América fue dejada de lado. Dirigido por el presidente Hoover, el gobierno se embarcó en lo que se ha llamado con precisión el «New Deal de Hoover».

El área de Washington estuvo traumatizada durante semanas por dos psicópatas imbéciles que iban por ahí disparando descaradamente a la gente desde el maletero de su antiguo Chevrolet. Lamentablemente, los agentes de la ley se encontraron con su rival.

Está claro que hay situaciones en las que los intereses de los sindicatos divergen del interés público en la transparencia y el buen funcionamiento de la policía. Pero los intereses de los sindicatos también difieren a menudo de los intereses de los miembros individuales.

Mientras el 9/11 se olvida en su mayor parte, una trompeta ensordecedora anuncia la presencia de otras supuestas crisis, como el covid y el cambio climático. El Leviatán está ahora emocionado y alentado por las posibilidades de nuevas reglas y nuevos documentos de identifidad.

El caso Rittenhouse ha destapado una gran amenaza para la jurisprudencia americana moderna, pero no la amenaza que los progresistas pretenden.

México no se ve obstaculizado por el capitalismo desbocado, sino por los actores estatales, ya sean ignorantes o malintencionados. El Estado no salvará la economía mexicana. La verdadera libertad de mercado lo hará.

«Nadie, incluyendo a Andrew Jackson, había argumentado explícitamente antes [de Lincoln] que la Constitución autorizaba u obligaba a una invasión a gran escala y a medidas coercitivas».

Si los estados de EEUU pueden actuar de forma independiente existe una mayor posibilidad de competencia entre jurisdicciones, lo que incentiva a los estados a ofrecer una mayor calidad de vida y a atraer a los recién llegados productivos.

Lincoln pensaba que la posibilidad de secesión daba demasiado poder a las minorías. La solución para él era que la mayoría coaccionara a la minoría, negando, por la fuerza, la retirada del consentimiento de la minoría.

El apoyo a una conscripción federal es contrario a las nociones de federalismo, descentralización o «república limitada». Los primeros americanos habrían visto el reclutamiento actual con miedo y desprecio.