La IA carece de inteligencia empresarial para planificar una economía
A pesar de lo que creen muchas élites, la IA puede hacer muchas cosas, pero no puede planificar con éxito una economía. Carece de la inteligencia de un empresario.
A pesar de lo que creen muchas élites, la IA puede hacer muchas cosas, pero no puede planificar con éxito una economía. Carece de la inteligencia de un empresario.
El cálculo económico no es una proposición de lo uno o lo otro. Incluso en las llamadas economías de mercado, como la de los EEUU, hay mucha intervención gubernamental que distorsiona los procesos de mercado.
Los progresistas se han distinguido en el pasado medio siglo por estar en contra del progreso. Es poco probable que esa tendencia cambie.
La celebración del setenta y cinco aniversario del Servicio Nacional de Salud británico enmascaró los verdaderos fallos de este sistema, que sólo puede empeorar con el tiempo.
Algunos afirman que la IA puede hacer viable el socialismo, pero ni siquiera la IA puede sustituir al cálculo económico empresarial.
Tras el colapso de la URSS, muchos socialistas depositaron sus esperanzas en el desarrollo de un «socialismo de mercado» que fuera económicamente eficiente y creara igualdad. El filósofo marxista G.A. Cohen disintió sabiamente.
La deuda estudiantil es un enorme problema social, pero la razón es que los propios costes de la enseñanza superior se han convertido en un gran problema y son una carga financiera cuyos costes superan a sus beneficios.
El socialismo moderno se basa en la interferencia del Estado en las relaciones humanas normales, económicas y de otro tipo. Es tan desastroso como el antiguo modelo de planificación estatal.
La policía secreta de Alemania Oriental, la Stasi, desarrolló el arte de la vigilancia masiva utilizando métodos predigitales. La tecnología moderna facilita mucho el trabajo.
El presidente Biden anunció recientemente a bombo y platillo que su administración transformará la economía de EEUU mediante la planificación central. Esto no acaba bien.